Del planeta Barnard b (a seis años-luz) llegó una señal de radio extraterrestre. Esta decía: “Hola, ¿cómo están?”. Respondimos: “Bien, gracias”, por la sola costumbre que tenemos de responder “bien, gracias”, aunque estemos mal. Y enviamos la señal de vuelta.
Doce años después recibimos otro mensaje: “Estabamos preocupados. Siendo ustedes una civilización atrasada, asumimos que querrían saber cómo resolver algunos problemas actuales; sanar muchas de sus enfermedades incurables, almacenar energía renovable, convertir plástico en árboles, pan, dicha. Pero aseguran estar bien: no insistiremos. Por nuestra parte, nos despedimos hasta 29 mil años más. Es que nos mudamos de planeta. ¡Cuídense!".