Asegura que si en Marte florecieran, por muy feos, atisbos de hierba, la humanidad, histérica, velaría por esa manifestación de vida a cualquier precio. En nuestro mundo, aunque abunde, la maleza es una excepción dentro del sistema solar. Y es por este respeto sagrado que la dejó crecer.
Claro, eso asegura ella. Pero el motivo es otro, y es más chiflado porque concierne al corazón. Entre la maleza, alta, tupida, cree distinguir a su esposo revisitando el jardín que tanto amó. Se enteraran los hijos, ordenarían desmalezarlo todo y a ella internarla.
Claro, eso asegura ella. Pero el motivo es otro, y es más chiflado porque concierne al corazón. Entre la maleza, alta, tupida, cree distinguir a su esposo revisitando el jardín que tanto amó. Se enteraran los hijos, ordenarían desmalezarlo todo y a ella internarla.
No. Este diciembre 31 no lo pasará sola.