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Mi amigo Árbol, plaza Beltrán Alfaro Cortés,
Villa La Tercera, La Florida
“Te recordaba más alto”. Treinta años después, visito al que fue un amigo que me hizo feliz en las alturas. Sigue igual, en la plaza, en el barrio de siempre. Solo yo me apuré en crecer y cambiar. “Y para mal”, le contaba al árbol. “No sé cómo ayudarme. Tampoco a mis papás que enferman más rápido de lo que envejecen ni menos a mi hermano menor que, de tan pequeño, no alcanzo a sacarlo del hoyo de las adicciones. ¿Dónde está la felicidad?”. Sorpresivamente, el árbol se inclina. Entiendo su invitación. Me monto. “Te recordaba más flaco”, me dijo.
Canción "Black hole Sun" - Soundgarden
El micro interesante, entretenido, creativo...
ResponderBorrarYa esos números?...
¿Peso, medida, valor ante la vida, otras circunstancias?... ¡Ya dirás! :)))))
Abrazo Julio.
Un árbol, compañero de juegos, escucha las penas, del visitante.
ResponderBorrarUn abrazo.
Te recordaba más alegre.
ResponderBorrarBeso
La carga de lo que vamos echando a la mochila con los años es lo que nos hace sucumbir. Nadie puede arrastrar la mochila de tantos años, por eso nos morimos.
ResponderBorrarAbrazooo
Amistades entrañables que no sucumben al paso del tiempo, el árbol aquel ha de haber sido refugio seguro hace 30 años.
ResponderBorrarAbrazo!
Los árboles, por muy viejos que sean, conservan muy bien la memoria.
ResponderBorrarUn abrazo.
Mis dos amigos árboles han crecido mucho desde que yo era adolescente.
ResponderBorrarVoy a verlos a menudo y les agradezco su sombra y que hicieran de portería de fútbol...
Los quiero una barbaridad.
Hola, Julio David.
ResponderBorrar¿Ha sido tu aniversario? Si es así, muchísimas felicidades, si me equivoco pues para cuando lo sea, (y me retiro entre nefastas clarividencias) ;) Uno mira atrás, y teme en este ahora no ser lo que otros necesitan, lo que nosotros creímos que debíamos ser, pero debo decirte que si el amor iba de su mano, nada malo se hizo, solo se vivió. Se vive. Residimos entre la nostalgia y la culpa, pero supongo que de eso trata en cierta medida el querer.
Un beso.
Pucha, tarde vine a dimensionar lo que preguntas. Y te contesto con otra pregunta: ¿Por qué crees que estuve de cumpleaños? Dependiendo de tu respuesta, y si es que sigues pendiente de la mía, que ya han pasado unos días, te diré qué tan nefastas (o no) son tus clarividencias. Un abrazo psicológico.
BorrarAcabo de buscar lo que significa pucha, y viene a ser algo así como disgusto. ¿Es así?
BorrarLo primero te diría que es por la fecha, siendo tan específica da muestra de pertenecer a un día importante, algo valioso, con significado. Lo segundo tus letras, en este caso atesoran un aura que puede que no sean de retroceso al pasado, de vivencia en sí, pero si expresan nostalgia de otro tiempo. De aquel niño que siempre permanece intacto, y la incomprensión con este ahora. Hay cariño en ellas, melancolía. Y como te dije en el anterior comentario, se percibe culpa, y eso hace que el escrito adquiera más intimidad.
Ahora es cuando me dices: déjalo ya, ;)
Un abrazo.
Déjalo ya ;)
BorrarAhora, con eso de los cambios de climas, hasta los arboles estan chungos...
ResponderBorrarBuena la tenemos, amigo
Cuando crecemos cambian las percepciones de nuestro ayer. Bonita y enternecedora historia, David.
ResponderBorrarMil besitos con cariño y feliz semana ❤️
Linda banda sonora del relato. Saludos.
ResponderBorrarQuerido Julio, precioso relato, todos tenemos un árbol a quien contarle nuestras alegrías y penas.
ResponderBorrarHay que abrazar a los árboles
Gracias querido amigo por tu comentario en mi blog y te cuento que me porte mal, fui por las casas tocando timbres y me escondía, fue divertido me hizo recordar a mi infancia.
Gracias a Dios la pase super bien, me llene de energía y de naturaleza pura.
Te dejo un abrazos y besitos, que tengas un precioso día
Mira, intuía que tenías por ahí tu lado malvado, ¡pero nunca imaginé que tanto! Jaja Si te llenaste de energía, tu abrazo me va a venir más que bien para contagiarme con un poco de ella. Y gracias por tus palabras siempre amables.
BorrarMuy bonito el relato Julio David, los árboles crecen a nuestro lado y tu protagonista le cuenta sus cosas y en momentos de pena su amigo el árbol le escucha y le invita a subir a ver el mundo desde las alturas.
ResponderBorrarBonita banda sonora
Un abrazo
Puri
Precioso y toda una vida por enmedio
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