Me encontré con Agustín. Estaba en silla de ruedas. ¡Qué tipo más bueno para quejarse! Así lo recordaba. Nada estaba bien. Ni él.
Perdió su movilidad corriendo tras su pareja (harta por no ser valorada). Como logró escapar, Agustín pensó que sus piernas no servían para nada. Y se desplomó. También empezaron a caérsele los dientes cuando decidió no salir más a un mundo que no le motibava sonreír.
Vivía de allegado. Ocupaba el sofá, pero por quejarse de la incomodidad, lo mandaron al patio.
Tiempo después lo visité. Encontré su cabeza, consciente, pero flotando en un frasco con formol.
Agustín desapareció... su cuerpo flota por ahí pero él ya no está.
ResponderBorrarMe da que Agustín se acomodó dentro de una fragilidad empoderada por el victimismo, pretendiendo que de algún modo otros debían cuidar de él. La verdad, me produce bastante pena, esperemos que un día despierte de ese duermevela en el que cohabita por el formol, y sea consciente que todavía puede andar y sonreír, por él mismo, simplemente por él.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo, Julio David.
Ja, ja, ja, ja, me da que Agustín se va a perpetuar más allá de la paz del estiércol.
ResponderBorrarEsperemos ya no se compadezca. Seguro tiene mucho aún para dar...
ResponderBorrarAbrazo grande!!
Me recordaste aquel chiste:
ResponderBorrar—¿Está Agustín?
—Hombre, estoy en la cama.
Abrazooo ( esto no es del chiste)
jaja me temo que este Agustín es la materialización viviente del síndrome de Calimero.. un pollito de dibus, siempre quejumbroso que se quejaba de la injusticia del mundo para con él.. Lo curioso de Agustín, es que en su proceso de decrepitud física, conserve consciente aun su cerebro.. en formol.. jaja vamos, que mucha neurona viva no creo que le quede al pobre.. segurísimo fue lo primero que se le murió… hartas de soportarle: )
ResponderBorrar¡Qué buenísimo eres escribiendo cortos! Cómo te admiro, yo soy incapaz. Necesito mil palabras para decir hola! : ) Un beso!
Querido Julio, donde esta Agustín, no lo encuentro.
ResponderBorrarAmigo querido gracias por tu comentario, me gusta portarme mal jajaja
Abrazos y besitos, te deseo una feliz semana
*♥♫♥**♥♫♥**♥♫♥*--*♥♫♥**♥*
Tudo tem um fim... E a vida não se conserva para sempre.
ResponderBorrarAbraço de amizade.
Juvenal Nunes
Muy tétrico tal como la vida de los sin-pies.
ResponderBorrarUn abrazo
Un tipo al que todo le importa poco o nada.
ResponderBorrarUn abrazo.
En formol como las cabezas de Futurama , quien sabe si en un mañana distopico ocurra
ResponderBorrarOtro abrazo
Agustín se quedó flotando en la nada. Triste vida. Triste final.
ResponderBorrarMuy bueno!